Entre más mustio el pueblo, más sádico es el karma

Los slasher es un género particular. La forma en como construyen la historia, el origen del asesino, sus intenciones y el porque de su sed de venganza o de sangre. Y debemos de ser honestos. También nos alegra el final de algunos personajes que a lo largo de la trama solo fueron como una piedra en nuestro zapato y celebramos la forma tan ruin y atroz en como acabó sus miserables vidas. Con ello. Creemos en grupo inframundo que esta nueva recomendación te gustará de sobremanera.

Todo comienza en «Abismo». Un pequeño pueblo que se sitúa en medio de la nada y que como única fuente de ingresos es una roca en forma de gallo que esta en un colina. Es el pueblo más tranquilo y aburrido que te puedas imaginar. Pero un día encuentran al sheriff asesinado brutalmente. Le arrancaron los fémures tan grotescamente y además lo decapitaron. Todos están alarmados, en pánico porque la ola de matanza aún sigue porque encontraron a otra víctima. En un estacionamiento de un bar con el mismo modus operandi. Y todo empeora porque una anciana dice que ha visto al asesino. Un ser grande, oscuro, con cabeza de ciervo, un verdadero demonio. Las tinieblas se siembran de la nada en este pueblo «tranquilo». Pero más bien la venganza viene a cobrar factura de manera radical y ultraviolenta.

En este libro, lo importante es ver como la trama va evolucionando. Tratar de adivinar quien es el culpable. Y sobretodo, descubrir el oscuro secreto que guardó el asesino durante años y que fue el combustible de su sangrienta venganza. Lo que lo impulso a no solo matar a sangre fría, incluso disfrutarlo. Sino la forma en como hace estos asesinatos tan performáticos. Sin duda el final te dejará boquiabierto, atónito y desorientado.